Hoy queremos traer una cita de uno de los libros de cabecera del akelarre. Se trata de Tomar la palabra. Mujeres, discursos y silencios, escrito por Dolores Juliano. En esta obra, la antropóloga argentina reflexiona sobre las relaciones de poder que permiten dar credibilidad y legitimidad a ciertos discursos y silencian o deslegitiman los provenientes de otros sectores sociales. Es difícil destacar una sola frase, pero os dejamos esta para picotear y animaros a leerlo:
La frase dice: “Las grandes orejas no nos capacitan para oír mejor los mensajes de los distintos sectores sociales, pero nuestras grandes bocas nos permiten engullirlos y hacerlos desaparecer”.
Este fragmento (p. 62) pertenece a una reflexión más general sobre el silenciamiento de aquellos discursos que no encajan en lo que tenemos predefinido. Especialmente, se refiere a esos ámbitos en los que se entrecruzan tensiones entre diferentes posiciones en los feminismos, como la prostitución. Y de cómo validamos las experiencias que encajan con lo que concebimos como víctima ideal y rechazamos otros, imponiendo nuestros puntos de vista.
En general, todo el libro es una invitación a repensar las relaciones de poder que nos atraviesan y de cómo afectan a la legitimidad de nuestras opiniones. Una oportunidad para reflexionar sobre cómo nos afecta la opresión como mujeres a la hora de tomar la palabra. Y, principalmente, conocer y sopesar nuestros privilegios de cara a construir espacios en los que quepan las presencias y voces de todas, todes y todos.
¿Lo habéis leído? ¿Qué os ha parecido? ¿Qué otras frases destacaríais de este libro de Dolores Juliano?