Después de unos días de camping regresamos con las pilas un poco más cargadas y nos pasamos por aquí para dejaros nuestra contribución en el monográfico “La agencia femenina en las narraciones audiovisuales”. En esta ocasión, la revista académica Cuestiones de Género: de la igualdad a la diferencia de la Universidad de León recoge textos donde se analizan diferentes medios de masas (cine, televisión, videoclips) desde una mirada crítica.
Nuestra aportación se centra en un análisis de series de animación infantil juvenil en las que llevamos un tiempo trabajando. Como seguramente ya sabéis, esta es una de las líneas de investigación centrales en nuestros estudios que hemos plasmado en diferentes artículos académicos y, por supuesto, ocupa uno de los capítulos de nuestro libro #Seriesdelaresistencia, publicado recientemente por la editorial sevillana Readuck (aunque, al final, hubiéramos disfrutado escribiendo un libro entero sobre ello, jeje!).
Aunque el análisis de este tipo de ficciones no tenga toda la atención y el reconocimiento que debería en la academia, lo consideramos fundamental a la hora de (re)pensar nuestros entornos y apostar por una profundización democrática desde la ciudadanía más pequeña. Bueno eso y, por qué no decirlo, es una de las líneas que más disfrutamos.
El artículo que escribimos se llama “Otra animación infantil es posible. Un análisis de las series Steven Universe, She-Ra y Star vs Forces of Evil” y lo tenéis disponible en abierto en la página de la revista (link en el nombre). A través de él, nos introducimos en la representación de los personajes principales y su respectivo impacto en la narración. Para ello, y como es costumbre, utilizamos como cesta metodológica el análisis de contenido cualitativo, la interseccionalidad y la matriz de dominación de Patricia Hill Collins que nos permiten abordar el estudio desde una perspectiva crítica y sistemática.
En definitiva, es un texto en el que desvelamos como, a través de la mirada de Steven Universe, Adora, Star Butterfly y compañía, las series apuestan por la diversidad en las presencias y por el diálogo y la empatía en sus narrativas. Algo que las aleja de modelos hegemónicos de dibujos animados que apuestan por la normatividad y la otredad. Una consecuencia que se puede relacionar con el perfil de sus creadoras: mujeres y personas no binarias jóvenes que posibilitan transformaciones a un lado y otro de la pantalla.